CATECISMO CATÓLICO

LA ILUSTRACIÓN Y LA REVOLUCIÓN FRANCESA

Después del Renacimiento y de la Reforma, nuevos continentes habían sido descubiertos y nuevas ciencias desenvueltas. Ahora filósofos equivocados atacaban la filosofía sólida de San Tomás de Aquino, porque imprudentemente desconfiaban del intelecto o de los sentidos. En Europa occidental, algunos hombres de la buena sociedad empezaron un movimiento que incitaba a cada uno a pensar independientemente y a apartarse de los predicadores de la Iglesia. Mantenían que no podemos pensar y escuchar al mismo tiempo ...
El movimiento también tenía un componente clandestino, la francmasonería, que era una continuación de las antiguas fraternidades paganas. La edad de la ilustración hubo llegado.
"¡Ecrasez l'infâme!", gritó Voltaire, - "¡Aplastemos al infame!" Hizo ilusión a la Iglesia. Puede ser que fuera indignado con razón por los males que algunos representantes de la Iglesia hubieron hecho. Éstos representantes son hombres como yo y tu, entonces pueden hacer mal, ¿no es verdad? Pero no podemos deducir que Dios no se preocupe cómo estamos después de que nos ha creado ...
Déspotas ilustrados en Prusia y Austria repelían la influencia de la Iglesia; por ejemplo levantaron algunas ordenes monásticas. En Francia, los francmasones les incitaron a los hombre pobres a rebelarse contra el rey y sus amigos nobles.

Conste que la Revolución Francesa también ha llevado muchas buenas cosas. El asalto sobre la Bastilla y la degollación de los nobles fueron el comienzo de la emancipación de la clase baja. Finalmente, la administración de la justicia llegó a ser más humana, y la democracía y los derechos humanos obtenían prioridad.
De otro lado, poco faltó que el Infante Jesús fuese llevado con el agua sangrienta del baño. La Iglesia fue forzada a que entregara muchas posesiones, los sacerdotes tuvieron que prestar un juramento de odio a la monarquía, y los revolucionarios quisieron reemplazar al Dios personal de Jesucristo por el Dios impersonal de la Razón ilustrada en el culto público. También era lástima que las guildas fueran abolidas. Más tarde, fueron reemplazadas por formas de organización que eran mucho más impersonales.
El primer concilio vaticano (1870) ha decidido que los seminarios tienen que enseñarles la filosofía tomística a los futuros sacerdotes, y que la asistencia del Espíritu Santo hace que el papa es infalible cuando se pronuncia 'ex cathedra' sobre cuestiones de la fe o de la moral.