CATECISMO CATÓLICO

por HFH Reuvers



ÁNGELES Y ÁNGELES CUSTODIOS

Rudolf Steiner enseñó en su antroposofía que cada hombre tiene un origen espiritual. Edificando sobre Platón y Goethe y otros, dijo que cada hombre lleva recuerdos desde el cielo.
Ésto no es el punto de vista católico. San Tomás de Aquino enseñó, siguiendo el hilo de Aristóteles, que cada hombre viene en la tierra como una hoja blanca.
¿Cuál es la experiencia de mí mismo? Cuando yo me enamoré por primera vez, y fue amor a primera vista, pareció como si ya supiera a ésa muchacha desde mucho tiempo. Pero, por supuesto, puede ser que éste saber haya sido un recuerdo de mi infancia.
Uno de nuestros hijos ha pasado algun tiempo en una clinica antroposófica. El doctor afirmó que nuestro hijo había desenvuelto un tumor porque no se sentía en casa en la tierra. Estuve en confusión, porque me pareció que había vuelto lo de arriba abajo. Ya que yo creo que mi hijo no se sentía en casa en la tierra porque había desenvuelto un tumor.

Como los seguidores de la antroposofía, yo creo que ángeles existen. Por cierto, hemos visto que nuestras almas son criaturas espirituales que pueden continuar existiendo sin sus cuerpos terrenales. Entonces, puede ser que existan también criaturas espirituales que nunca han sido agregados a algun cuerpo terrenal. Por eso podemos tomar en serio lo que muchos hombres han testificado sobre éstos mensajeros desde el cielo. Dios se sirve de éllos siempre que quiera hacer alguna comunicación directa. Ya que Dios es demasiado grande para que se haga visible.
Así, la biblia nos informa sobre el arcángel Gabriel, quien anuncia a la virgen María las noticias alegres del Evangelio (Lucas 1, 26-38). También nos enteramos del arcángel Miguel. Versaremos sobre él en una sección venidera. Y nos enteramos del arcángel Rafael, quien acompaña a Tobias en calidad de ángel custodio.

Entonces, yo sé que tengo a un ángel custodio privado, como en la oración corta que aprendí en mi infancia: "Ángel de Dios, que eres mi custodio, ya que la soberana piedad me ha encomendado a tí, ilumíname, guárdame, rígeme y gobiérname. Amén." Cada vez que tengo que optar por una de dos cosas, mi ángel me alienta a optar por la alternativa buena.


catecismo


HOME